Un pequeño emprendedor en un pueblo, una mujer que se incorpora a la agricultura o la ganadería… esas pequeñas iniciativas crean en el mundo rural una red de empleo. El Programa de Desarrollo Rural de Aragón ha contribuido a ello.
Hoy en día, los grandes proyectos creadores de empleo no son lo que caracteriza el mundo rural. La industrialización -con mayúsculas- está hecha para los perímetros urbanos, donde existe una mayor necesidad de empleo, directamente relacionada con una mayor concentración de la población.
El mundo rural ha optado por un desarrollo a través de los que podríamos denominar «micro empleo». Pequeños promotores, agricultores que toman el relevo generacional o se instalan por su cuenta, aportando nueva visión a un negocio de siglos… Este mapa del empleo rural lo completa la agroindustria, concentrada en zonas determinadas de nuestra comunidad donde existen buenas comunicaciones y agua.
No es tanto la cantidad, como la oportunidad del empleo creado. Cinco Villas, Hoya de Huesca y Monegros van a la cabeza de la creación de este microempleo. Junto a la Comunidad de Calatayud, se encuentran por encima de los 100 empleos creados. También es en este apartado donde más empleo femenino se crea con lo que implica en la fijación de población al medio rural.