Verónica Ballarín conocía a fondo el mundo del ovino cuando decidió incorporarse a este negocio. Junto a su marido, también ganadero, crían corderos en Fraga, Bajo Cinca, que destinan al mercado musulmán en Francia. “El cordero en España se va a convertir en una carne de lujo” opina.
-Me ha contado que estuvo más de dos años estudiando su incorporación como joven agricultora.
-Cierto, una decisión muy meditada y estudiada, tomada junto a mi marido. Una inversión tan elevada como la que afronté no se puede tomar a la ligera, teníamos que ver la viabilidad del negocio. En el sector ganadero resulta imposible comenzar de cero. Hace falta un apoyo, unas infraestructuras… Las ayudas del Programa de Desarrollo Rural vienen bien, no lo niego, pero estaría mejor si las concedieran al principio… aunque sé que resulta difícil.
-Su cordero no se queda en España.
-Apostamos hace unos años por la exportación en canal, sobre todo a Francia y con destino al mercado musulmán que implica sacrificar corderos de mayor peso de lo que se consumiría en España y seguir las normas para obtener un certificado halal. Para dar este salto nos hemos movido nosotros. No soy muy optimista respecto al futuro del mercado nacional.
-¿Por qué?
-Porque en nuestro país el cordero va muy ligado a las celebraciones, las barbacoas, la restauración y con la actual crisis el consumo se resiente. Y apunto a otros factores: Por una parte el sector se encuentra envejecido, con apenas relevo generacional. Se trata de una carne de gran calidad, de un animal que pasta en los campos y además, en los hogares se consume poco cordero.
Se demanda sobre todo las partes noble (costillas de palo, riñonada) porque son más fáciles de cocinar. Y el resto del cordero, que exige más tiempo de preparación, se consume mucho menos. Por lo que el carnicero deben repercutirlo en el precio… así que acaba convirtiéndose en un plato caro para el menú diario.
Admiro, de verdad, todas las ideas que buscan innovar y dar nuevas salidas a la carne de cordero.
-Con más de dos mil cabezas, cuenta con pastores asalariados, ¿es fácil conseguir este perfil de trabajador?
-En absoluto, muy difícil. Suelen ser personas extranjeras porque, en nuestra experiencia, la mayoría de los españoles no quieren ni oír hablar de trabajar en fin de semana. Me ha alegrado leer la noticia de que van a poner en marcha una escuela de pastores en Plan.
-¿Se concentra su trabajo en torno a la fiesta musulmana del cordero?
-No, porque matamos todo el año, aunque en esa fecha se concentran más sacrificios.
El Programa de Desarrollo Rural (PDR) de Aragón 2014-2020 representa la mejora de la productividad y de la competitividad del sistema agroalimentario como base de la economía y de la generación de empleo rural, la gestión sostenible de recursos naturales y la acción por el clima y el desarrollo territorial equilibrado.
Este proyecto de Incorporación de Jóvenes Agricultores, pertenece a la Medida 6, Submedida 6.1. El importe de la ayuda ha sido de 65.000 €. El presupuesto total de la Submedida para el período 2014/2020 es de 61,1 millones de €.